Misioneras en Rio de Janeiro (Colégio Mater Consolationis)

O Colégio Mater Consolationis, do Rio de Janeiro, fundado em 02/07/1954, teve suas atividades encerradas em 1975. Desde 01/08/2005 reabriu as suas portas como Centro de Integração Social Santo Agostinho (CISSA), com o objetivo de atender crianças e adolescentes na faixa etária de 06 a 14 anos e jovens de 15 a 17 anos, de ambos os sexos, oferecendo-lhes um programa sócio/educativo e qualificação profissional (Informática), tendo em vista seu desenvolvimento como cidadãos e a melhoria de suas condições de vida e preparo para inserção no mercado de trabalho. Para que isso aconteça, nós Irmãs Agostinianas Missionárias contamos com a colaboração importante de leigos e leigas nesta missão.

Este centro abre também as suas portas para as necessidades de formação da Igreja local ,comunidade e associação de ex-alunas. Como marca essencial de toda a nossa ação educativa, esta presença e relação com as crianças, jovens e adultos “visa colaborar com cada um em seu processo de plena realização para que surja como pessoa consciente de sua dignidade, sã, crítica, aberta aos valores transcendentes e comprometida em fazer presente o reino pela fraternidade universal, o amor, a justiça e a paz “(cf. C.51,56).

Tengo una corazonada

Tengo la corazonada de que el mundo puede ser mejor si todos ponemos de nuestra parte.
Tengo la corazonada de que si doy lo mejor de mi mismo es posible que el amor reine entre nosotros.
Tengo la corazonada de que si sonrío al que pasa a lado puedo sembrar felicidad.
Tengo la corazonada de que la Vida Religiosa puede ser un camino para mi.
Tengo la corazonada de que si doy un primer paso luego vendrá otro y otro...
Tengo la corazonada de que las Agustinas Misioneras están siendo testimonio en muchos lugares de este planeta.
Tengo la corazonada... 

Misioneras en Brasil (Centro Infanto Juvenil de Acolhida Santo Agostinho)

Depois de vários anos de inserção em São Miguel Paulista – Jardim Helena, as Irmãs Agostinianas Missionárias veem um sonho tornar-se realidade: o Centro Infanto Juvenil de Acolhida Santo Agostinho ou como muito carinhosamente ressoa da boca dos que ali estão: CIJASA.

Atualmente atendendo aproximadamente 400 educandos entre crianças e adolescentes de 07 a 14 anos, o CIJASA tem por missão ajudar na formação humana cristã orientando-os à vivência de valores, bem como, a se descobrir como pessoa consciente de sua dignidade, crítica, responsável e comprometida na construção de uma sociedade mais justa e humana.

O CIJASA comprometido e compreendendo cada educando como ser único e individual, também tem como papel prepará-los para fazer parte de uma sociedade em constante transformação, cada vez mais exigente, competitiva e caracterizada pela valorização do conhecimento.

Atento a essas exigências, o Centro oferece um leque das mais diversas atividades educativas visando proporcionar aos seus educandos:

Leitura crítica da própria realidade e do mundo;Integral relação intra e interpessoal;Respeito aos limites, regras e normas estabelecidos;Autonomia;Concentração, entre outros.
Dentre as atividades oferecidas destacam-se: leitura e escrita, informática, ensino religioso, teatro, dança, percussão, capoeira, futebol, brincadeiras de roda e trabalhos manuais.

Esse sonho inicial e hoje realidade concreta conta com a presença e ação das Irmãs Agostinianas Missionárias, formandas, educadores e demais colaboradores, todos juntos e diretamente ligados para atingir uma única meta: educar e promover a vida.

Fuego de amor en tu interior


Fuego de amor en tu interior, dando calor al corazón que late dentro de ti y contagia la llama de la vida a quienes se acercan a ti.
Fuego de luz que ilumina lo que eres y te da fuerza para avanzar llevando como antorcha el mensaje de Jesús hecho vida en ti.
Fuego pasional que hace de tu vida pasión por la vida y por darla a los otros.
Fuego que envuelve cuando eres coherente con lo que crees y con lo que haces.
Fuego que se reaviva desde el encuentro contigo mismo y con Dios.
Fuego que nace de dentro para quemarte, para que estés despierto y seas capaz de contagiar a los demás.
Llama de vida que da luz y calor cuando eres capaz de darte por completo sin miramientos ni recortes.
Corazón para el mundo, fuego para el mundo y antorcha que ilumina el camino para que sigas siendo testigo de Jesucristo.

Misioneras en Mahanje-Tanzania


Mahanje está situado al sur de Tanzania, a 135 Km. de Songea, capital de la región, y a unos 900 Km. de Dar El Salaam. Es una zona montañosa, entre los 800 y los 1400 m. de altitud, con clima tropical que se caracteriza por tener "dos estaciones" al año: 6 meses de lluvia y 6 meses de sequía.  

La población es muy pobre, vive diseminada en pequeños núcleos y se dedica casi exclusivamente a la agricultura de subsistencia.  

El nivel educativo es muy bajo, existen pocos colegios de primaria y ninguno de secundaria en la zona.
El dispensario de Mahanje pertenece a la diócesis de Songea, y hasta 1978 estaba dirigido por las Hermanas Benedictinas alemanas. A partir de esa fecha pasó a depender de las Agustinas Misioneras.  

Lleva a cabo su labor como único centro sanitario en la zona norte de Songea, bajo la dirección del Hospital Benedictino de Peramiho, Songea, a 175 Km. de distancia. 
  
Atiende a unos 35.000 pacientes al año, provenientes de hasta 50 km. a la redonda.  

La mayoría de los pacientes son mujeres y niños.

Las enfermedades más comunes son la malaria, filaria, tifus, etc..., aumentando vertiginosamente los enfermos de SIDA, aunque allí no tienen posibilidad de realizar los análisis...
También realizan cursos semanales dirigidos a madres: higiene y cuidado de los niños, campañas de educación sanitaria, educación sexual, campañas de vacunación...

El creciente número de enfermos les ha obligado a contratar más personal sanitario, siendo en la actualidad 2 médicos y 5 enfermeras.
El Hospital, que tiene 50 camas, carece de luz eléctrica y está dividido en diversas dependencias: dispensario, salas de niños, salas de mujeres y salas de hombres. 
  
En época de lluvias se hace muy difícil el tránsito de una zona a otra.

El principal problema de Tanzania, y en general de África, es la educación... Dada la economía de subsistencia de muchas familias, son pocos los niños que pueden acceder a las escuelas..., ya que los padres tienen que asumir una parte elevada del coste del servicio... 

En las escuelas del Estado los alumnos tienen que pagar más que en las privadas, que cuentan con becas de Europa.

Educando en valores (España-Madrid)


Nuestra acción docente y educativa se inspira en una propuesta coherente de valores y expresa una vivencia de actitudes: que nuestros alumnos no sólo aprendan a pensar y a hacer, sino también a ser y a compartir.
La familia agustiniana tiene como emblema un corazón y un libro. Ambos elementos constituyen también el símbolo gráfico de la pedagogía inspirada en el pensamiento de san Agustín. Aprender a ser y a compartir o –formulado de otro modo–, enseñar a pensar y a amar, se presenta como una síntesis genial de la educación agustiniana. El libro y el corazón integrados en una misma imagen.
La noble posibilidad del pensamiento y el ejercicio humano del amor consciente. El amor inteligente, la verdad que hace relación al amor, y el amor que hace relación al corazón.
Aprender a ser y aprender a compartir es tanto como señalar las dos metas de la pedagogía agustiniana, a las que se llega por el camino de una educación en valores.

Compartir y convivir (Galapagar y Becerril)

Estamos en Galapagar y Becerril de la Sierra con dos casas de espiritualidad dedicadas a convivencias y Ejercicios Espirituales.